Mi primer PC

Ojeando el blog de Eduardo me encontré con una entrada que me gustó. Básicamente en esta entrada contaré lo mismo pero enfocándome más en los videojuegos que disfruté en mi primera máquina.

Desde que estaba en párvulos ya tenía en casa un Spectrum Sinclair ZX 128 KB... pero me niego a considerar ese trasto un ordenador. Por lo que realmente mi primer ordenador fue un Pentium MMX a 200 Mhz con 32 MB de RAM, una gráfica S3 ViRGE, menos de tres gigas de disco duro y un módem a 33.000 baudios (sí, entonces no se medían en KB). Corría el final de 1997 y gastaba Windows 95 como sistema operativo. Su precio rondaría las 250.000 pesetas con impresora (unos 1.500 euros).

Me compré tres juegos antes de tener el equipo (es lo que tiene saber que tarde o temprano lo tendrás), dos de fabricación española y uno que quiso comprarme mi padre por que sí:

Arctic Moves

Arctic Moves fue el juego encargado de cerrar una de las trilogías más famosas de la época de oro del software español (sus predecesores fueron Army Moves y Navy Moves). Realmente el juego salió a la venta con cuatro años de retraso puesto que originalmente estaba pensado para Atari ST, pero la crisis económica que sufría Dinamic Multimedia hizo que se migrara el proyecto a PC.

A modo de anécdota el juego valía casi dos mil pesetas (unos doce euros) y al finalizarlo se anunciaba a bombo y platillo el futuro Desert Moves, título que nunca vio la luz. El juego estaba gracioso, pero para que engañarnos... yo entonces tendría mis catorce años y me lo compré por que salía un alien en la portada.

F - 16 Combat pilot

Sí, este es el juego que eligió mi padre. Todo chaval sabe que cualquier regalo procedente de un padre significa: o que le gusta a él, o que era de los baratos en la tienda. Este caso cumplía con la segunda premisa, además creo que le ayudó a decidir una pegatina que ponía "Juego del año" en vete a saber que estúpido certamen. Y es que es uno de los juegos más aburridos que he jugado en mi vida: sus gráficos vectoriales no arreglaban la prácticamente ausencia de enemigos y lo jodido que era aterrizar (sí, he dicho un taco). Anotar que el juego era de 1989...

PC Fútbol 6.0

Probablemente el juego en el que más horas he gastado en mi vida, hasta tal punto que en su día llegué a modificar su base de datos con un editor hexadecimal para tener la plantilla del Valencia actualizada. Su excelente adicción se veía mermado por un pequeño problema, este juego era una fábrica de bugs: Jugadores que metían goles y los fallaban en la repetición, equipos que se quedaban sin porteros y que en vez de fichar otro fichaban otra demarcación aleatoria, equipos que contrataban futbolistas y les ponían de clausula de recisión un importe inferior a la compra... ect. Eso sí, poder fichar futbolistas jubilados como Butragueño, Maradona y Pelé era todo un puntazo.

Y llegó 1998... y con él un aluvión de juegazos: La edición de PC del Tomb Raider 2 se pulía en gráficos a su hermana de PS-X; Con el mundial de Francia a la vista, EA Sports sacó a la venta uno de sus mejores juegos hasta la fecha: Fifa 98. Subtitulado "Rumbo al mundial" podíamos jugar a ser seleccionadores y convocar a los futbolistas que nos diera la gana. Su jugabilidad era tan genial que incluso podías seleccionar el ratón a modo de gamepad; También salió a la venta el Final Fantasy VII, un juego por el que abandoné mi S3 ViRGE para agenciarme por 14.000 pesetas (unos 84 euros) una Vodoo Rush de 4MB.

Y a finales del 1998 llegó el apocalipsis: Windows 98. Un sistema operativo que apenas traía novedades y que hacía que todo corriera el doble de lento. Recuerdo que era tan desesperadamente lento que tuve que actualizar mi querida máquina a un AMD 350 con 64MB de RAM (es decir, ¡cambié de placa, procesador y tipo de memoria!).