Los sustitutos

En un futuro no muy lejano los humanos controlamos a maniquíes para realizar nuestras tareas diarias: los enviamos de compras, los utilizamos para ir al trabajo... y todo eso sin que nos movamos de la habitación. La aparición de estos maniquíes, conocidos como "sustitutos", revoluciona la sociedad: descenso en picado de la criminalidad, todo el mundo es físicamente guapo, y Bruce Willis puede hacer saltos acrobáticos imposibles.

Una noche aparece muerto el hijo del creador de "los sustitutos", produciendo el primer homicidio en 15 años. El agente del FBI Tom Greer se encarga de la investigación, sin darse ni cuenta que esto es tan sólo la punta del iceberg de una conspiración.

¿Mi valoración? Pese a resultar una idea atractiva, estamos ante una película decepcionante con un guión absurdo. Además este mundo futurístico nos plantea una serie de dudas:

• Estos maniquíes transmiten un volumen bestial de datos: capturas de pantalla de calidad de varios megapíxeles a unos 60 frames por segundo y sin lag. ¿Cual es la velocidad del ancho de banda que consumen?
• Al ser un canal de datos inalámbrico, ¿estamos seguro que semejante volumen de datos a esta velocidad de frecuencia no resulta cancerígeno?
• Los vagones de los trenes de metro tienen cargadores para "sustitutos". Entonces: A) Los trenes requieren de una cantidad energética extra muy superior a la actual; B) De disponer de esta carga energética, los trenes del futuro deben de ser terriblemente volátiles.